El 13 de marzo de 2022, Telemadrid emitió el programa "Ruta 179" dedicado a Miraflores de la Sierra en el que tuve unos minutos para hablar de las obras de encargo que tengo en el municipio, en el que vivo y que me ha visto crecer. Todo el reportaje fue maravilloso y les agradezco mucho que mostraran también mis obras más personales. Te voy a contar un poco más de lo que significaron estos encargos cuando los hice, antes de compartir el vídeo de mi intervención.

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En 2003 se inauguró el homenaje al "Perrero", una escultura que representa una tradición muy arraigada en Miraflores, que pasa de generación en generación y que ya forma parte de las fiestas más vistosas de la Comunidad de Madrid. Durante el tiempo en el que la estuve modelando, en el momento del montaje y en su inauguración me acompañó una emoción profunda, era una gran responsabilidad y solo pensaba en conseguir plasmar la esencia de este personaje con respeto y fidelidad. En mi trabajo elimino lo superfluo, voy a la síntesis y en una figura llena de detalles (mantón de Manila bordado, abalorios, lazos, camisa con chorreras, puntillas, cencerros, sombrero...) era todo un reto al que tenía que enfrentarme sin perder mi sello propio.

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El momento de descubrir la obra que me han encargado siempre me genera unos segundos de incertidumbre, comprensible ¿verdad?, ya no hay vuelta atrás y hay que ver la cara de los que la contemplan por primera vez y que la verán cada vez que pasen junto a ella en su día a día. Viviendo en el mismo sitio la presión es aún mayor. Afortunadamente tuvo muy buena acogida y es una referencia para vecinos y visitantes.

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En 2008 se me presentó la oportunidad de un reto realmente difícil, el encargo del busto de Vicente Aleixandre, premio Nobel de literatura en 1977 y que estuvo estrechamente unido al pueblo. Un retrato tiene que recoger la esencia más profunda del personaje protagonista, no tenía nada que ver con la figura del perrero que era un rostro neutro... Además estaría ubicado en un lugar relevante.

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¿Cómo lo llevaría a cabo? Necesitaba el mayor número de fotografías posibles de Vicente Aleixandre y eso no sería un problema, había un montón. ¿Por qué necesitaba tantas? Para mí, la esencia de cada persona está en la mirada y su carácter y gesto se mantiene a pesar de la edad y este genial poeta tenía una sonrisa entrañable, un gesto que lo presentaba amable, cercano, con estilo y personalidad (su corbata de lunares me encantó), así que eso era lo que tenía que transmitir: su sonrisa.

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Otro aspecto que me interesaba era integrar la poesía en la propia escultura y dar un poco de movimiento, así que hice un corte asimétrico y en el dorso grabé a mano sobre el bronce una parte del poema que dedicó al álamo, ya que estaría mirándolo de frente. La escultura es una disciplina que puede (y debe) verse rodeándola, tiene que tener interés desde cualquier ángulo y eso es algo que tengo siempre presente, incluir ese poema completa y define la identidad de tan ilustre vecino.

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Desde aquí quiero agradecer la confianza que las diferentes corporaciones municipales depositaron en mí para realizar estas esculturas que forman parte de su patrimonio. El trabajo con planos y eliminar detalles para reforzar la esencia en mis trabajos es una apuesta personal para conseguir transmitir emociones de un modo directo y cercano. En la obra de encargo más figurativa tengo que equilibrar las necesidades de lo representado y mi propia manera de entender y vivir esta disciplina que me conquistó, siempre es difícil pero conseguirlo es gratificante. Quiero dar las gracias a todos los vecinos de Miraflores que me animan a seguir creando y siguen mi trayectoria.

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Si aún no conoces este bello pueblo serrano, te invito a visitarlo y a disfrutar de todo lo que te ofrece. Seguro que volverás...

Un abrazo. ¡Dentro vídeo!