La medalla es una disciplina poco conocida, pero para mí tiene una maravillosa capacidad de expresar emociones, contar historias, homenajear de una manera discreta a personas que dejan huella y capturar sutilmente un instante.
Piezas que caben en la palme de la mano, que tiene la fuerza de un poema que nos conmueve y emociona.
Pequeñas obras en bronce, en series cortas, que invitan al coleccionismo y al mismo tiempo se convierten en un regalo especial que siempre sorprende.
El bajorrelieve es una rama de la escultura, igual que la medalla y que me permite trabajar mayores tamaños, incluso monumentales. Pensando en desarrollar obras en bronce para poder colgar en la pared, di un paso más y creé una colección a la que llamé “Ventanas” que integra la medalla en varios planos de una manera muy personal.
Esta colección está formada por doce obras, de las que ya solo están disponibles nueve, y que decidí que haría solo cinco originales de cada una.
Piezas únicas y exclusivas, esculturas que se integran en nuestro hogar convertidas en embajadoras de una técnica llena de dificultad. Un desarrollo de mis medallas que me brinda la oportunidad de seguir creando.